Blake Snell finalmente optó por un acuerdo de dos temporadas y 62 millones de dólares con los Gigantes de San Francisco, rechazando así la oferta de los Yankees de Nueva York. Aunque los Yankees también estaban interesados en adquirir al destacado zurdo, el costo total de su contrato habría sido significativamente mayor debido a las altas tasas impositivas en el estado de Nueva York.
Según informes de The Athletic, los Yankees habrían tenido que desembolsar un total de 96.1 millones de dólares, incluidos los impuestos, para firmar a Snell por dos temporadas, una cifra mucho más alta que los 62 millones que aceptó con los Gigantes. Esta diferencia de costos se debe a las contribuciones tributarias más elevadas en Nueva York en comparación con California.
A pesar del interés de los Yankees en Snell, el equipo consideró que no sería rentable tenerlo hasta 2025, especialmente considerando la posibilidad de que optara por salirse de su contrato después de la próxima temporada. Este mismo escenario ahora se presenta para los Gigantes de San Francisco, quienes también podrían enfrentar una situación similar en el futuro.
Con la lesión de su as monticular Gerrit Cole, el gerente general de los Yankees, Brian Cashman, se encuentra en la búsqueda de alternativas para reforzar el cuerpo de lanzadores del equipo, consciente de que Blake Snell ya no está disponible como opción.